¡¡LA CARA ALTA!!

     

     

     Hemos visto como seis temporadas consecutivas nos eliminaban en octavos de final de la Champions. Hemos asistido a eliminaciones sonrojantes frente a equipos de inferiores categorías y hemos vivido sin ganar la Copa del Rey en 17 años.. Hemos sufrido goleadas humillantes en el Bernabeu frente a Clubes económica y deportivamente menores (Osasuna, Zaragoza, Mallorca, entre otros...) Hemos permanecido impasibles a un vaivén de entrenadores, jugadores, directores generales y presidentes. Vimos como se desintegró la Quinta del Buitre y vagamos por el desierto recordando que (Ligas aparte) "cualquier tiempo pasado" fue mejor, hasta el 98.  Por nuestras filas han pasado gente como Spasic, Prosinecki, Villarroya, Ognienovic, Petkovic, Vitor, Baljc, Secretario, Faubert.... Hemos visto como era imposible ganar durante años en Riazor o en el Campo Nuevo. El Barcelona nos pasó por encima con Ronaldinho a la cabeza y tuvimos que sufrir como el "pseudomadridismo" más acomplejado le aplaudía en nuestro propio Estadio con la consiguiente publicidad mediática, cuando creíamos que completaríamos una nueva remontada liguera nos endosaron el 2-6. La temporada pasada fuimos goleados en casa del eterno rival y la "serie de Clásicos" se saldó con un balance negativo para nuestros intereses........ ¿Y? ¿Qué ha ocurrido SIEMPRE?

QUE NOS HEMOS VUELTO A LEVANTAR.

Esta vez no va a ser menos. Pero tiene una gran diferencia con las demás. Hemos estrechado, y diría superado, la distancia deportiva que manteníamos con "los que se suben al Campanario y ven el del pueblo de al lado". Les vencemos en su terreno de juego cuando la temporada pasada nos endosaron la famosa "manita". Un campo, donde hemos visto como generaciones y generaciones de algunos de nuestros mejores futbolistas se daban una y otra vez de bruces. Hemos adelantado al que muchos "expertos" del balompie consideran "mejor" o "uno de los mejores" equipos de la Historia. Hace apenas cinco días de ello.

Las victorias en nuestro domicilio se cuentan por goleadas, como no recordábamos desde la Quinta del Buitre. Con un gran número de ellas en campos ajenos y territorios tradicionalmente hostiles donde costaba "dios y ayuda" que los "galácticos" de turno no se arrugasen. Ahí quedará el record de goles para demostrarlo y para la Historia.

Por segunda temporada consecutiva alcanzamos las semifinales de Copa de Europa, como mínimo, nuestro sitio natural. ¿Queremos más? Por supuesto. Yo el primero. Pero al menos, análisis deportivos aparte, vamos a reconocer que estamos en el buen camino. 

¡Por supuesto que la plantilla necesita retoques! ¡Claro que no dimos nuestra mejor versión! De necios sería no reconocer que ayer no se jugó bien. Pero vamos a reconocer de una santa vez que estamos en la segunda temporada de un proyecto con el que la paciencia por parte del madridismo dará sus frutos y con el que, como no me canso de decir, LO MEJOR ESTÁ POR LLEGAR.

Acabé abatido, destrozado, lo reconozco. No tenía fuerzas ni para mirar la fatídica tanda de penaltis. Notaba como el corazón me iba a estallar. Cuando abandoné mi localidad, miré para atrás y ví como un pedazo de mi alma madridista se quedaba allí. No lo esperaba. Pero no ha sido, ni de lejos, la mayor de las decepciones que me he podido llevar con nuestro RMCF. 

Cómo me dijo un gran madridista antes de entrar al partido: "Al Real Madrid lo quieres como a un hijo. Un día te trae malas notas y te enfadas con él, incluso lo castigas. Pero no por eso puedes dejar de quererlo".

Escribo todavía hoy, con la garganta todavía dolorida, casi sin voz, con las palmas de las manos enrojecidas, cansado, sin apenas haber pegado ojo, con un martilleo constante en la cabeza dando vueltas a lo ocurrido ayer, eliminado en semifinales de Copa de Europa.........si. Pero con el ORGULLO intacto.